Maridajes Sin Complicaciones con 4 Vinos Perfectos para Toda Ocasión
¿Qué es el maridaje?
El maridaje como en las relaciones humanas, puede mezclar elementos de todas las naturalezas en la gastronomía para hacer un buen match. Esto a través de la unión de dos o más ingredientes que llevan sabores contrastados, similares y aromáticos (olores) en perfecta armonía.
Esta combinación logra combinar bien lo dulce, salado, ácido y amargo sin que ninguno predomine. En otras palabras, un maridaje es una experiencia placentera que se produce cuando se combina una bebida con algo de comer.
Sin embargo, no siempre es fácil dar con el punto exacto donde esta experiencia sucede de forma tan celestial como lo narran los sommeliers. Es un juego de alquimia y de cantidades; de combinaciones y de memoria.
En este sentido, Riunite el vino más vendido en nuestro país, es un vino tan flexible y con carácter que permite hacer maridajes perfectos sin complicaciones.
Dentro de su gran portafolio podemos encontrar el vino moscato, rosado, lambrusco y lancellotta. Descubrimos sabores y texturas ideales para cada uno.
Si eres amante del vino moscato, una combinación ganadora con esta bebida es el pescado. El salmón curado con betabel y smash de aguacate y un poco de caviar, será un acierto en cualquiera de tus reuniones.
Pero si lo tuyo es el vino rosado, un tartar de atún será ideal para enriquecer el sabor de este vino con sabor suave, fresco y ligero. Sus notas frutales son una delicia para el paladar; es ideal para una tarde de anécdotas y risas en compañía de familia o amigos. Sin lugar a dudas, un vino que hará de tus momentos algo especial.
El vino tinto Lambrusco acompaña muy bien pastas con carne, costillas bbq, pierna adobada, pizza, carnes frias y quesos. Es excelente con platos como el lomo a la ciruela, hojaldres o romeritos, ate con queso, pavo relleno, pastel de chocolate o unas ricas empanadas. Su sabor frutado con reminiscencias de semilla de durazno, brinda dulzor y es ligeramente ácido, con taninos suaves y un final refrescante.
Por otro lado el vino Lancellotta es ideal para disfrutar con platillos como la pierna adobada, pollo asado, ensalada con frutos secos y quedo de cabra, tarta con frutas o panqué de elote. Su color rojo obscuro y profundo, es brillante y expresivo, con aromas muy frutales, moderada acidez, astringencia media a moderada, textura muy placentera, y un toque “dulce y burbujeante”, esto lo hace un vino fresco, ligero y muy placentero al paladar.
El maridaje de vinos es una expresión creativa de la relación entre la comida y el vino. El objetivo no es necesariamente encontrar maridajes perfectos, sino explorar nuevos sabores y combinaciones para crear algo especial para ti y tus invitados. ¡Atrévete a descubrir tus favoritos!