¿De dónde Proviene la Historia de Besarse Bajo el Muérdago?

¿Alguna vez te has preguntado de donde surge esta práctica, durante las fiestas navideñas?

La costumbre de besarse bajo el muérdago permanece en muchos países del norte de Europa, así como en América del Norte.

El caso documentado más antiguo del beso bajo el muérdago tuvo su origen en Inglaterra en el siglo XVI, pero para este entonces ya era una tradición muy popular. En algunas partes de Europa, se creyó como una promesa de boda, así como una predicción de matrimonio feliz, lleno de bendiciones con el nacimiento de muchos hijos.

Los origines de besarse bajo el muérdago en Navidad se remontan al siglo XVII. Se creía que atribuía un poder mágico que daba la vida y tenía la habilidad de traer la paz entre los enemigos.

En Escandinavia, el muérdago era considerado una planta que significaba la paz, bajo la cual los enemigos podían expresar la tregua y con ello hacer las paces.

En el siglo XVIII, besarse bajo el muérdago tomó un nuevo significado. Se creía que aquella mujer que recibiera un beso bajo el muérdago en Nochebuena encontraría el amor que busca o conservaría el que ya tiene. También se creía que una joven bajo el muérdago no rechazaría ser besada, y que un beso apasionado podría significar el comienzo de un gran romance.

Por el contrario, si una mujer no era besada mientras estaba bajo el muérdago, significaba que no se podría casar durante otro año. Esto por supuesto significaba un gran estrés para las chicas jóvenes durante las fiestas navideñas. Después, tras cada beso bajo el muérdago, el hombre debía arrancar las bayas de la planta.

Normalmente, si una pareja pasa por debajo de una puerta con muérdago, deben besarse si quieren que les proteja la buena suerte.

Esta tradición de besarse bajo el muérdago se asocia con la festividad griega de Saturnalia y posteriormente con los ritos de matrimonio primitivos. Entre las creencias de las que parte esta tradición se encuentran los poderes supuestos relacionados con la fertilidad, así como los también supuestos capaz de poder dar la vida.

Otra tradición asociada a ésta planta, es que cada 13 de diciembre, día de Santa Lucía, se quema el muérdago que se ha conservado durante todo el año detrás de la puerta de nuestra casa, se dice que con ello se eliminan las malas energías acumuladas y retenidas por el muérdago a lo largo del año. Ahora bien el nuevo muérdago, será el encargado de protegernos durante todo el año siguiente.

¿Y tú sigues esta tradición? ¡Cuéntanos!